Manténgase activo en cualquier nivel que sea apropiado para usted. A veces esto se puede hacer por su cuenta. Otras veces puede requerir un cuidador o un fisioterapeuta. Hay maravillosos grupos para adultos mayores donde la actividad física es supervisada y apropiada para la edad.
Los ejercicios aeróbicos en la piscina pueden ser útiles si hay limitaciones para caminar debido a dolor en las articulaciones o neuropatía.
El yoga suave o Pilates pueden ayudar a fortalecer el núcleo.
Existen clases formales para el entrenamiento del equilibrio.
Si ha tenido un ataque al corazón, la rehabilitación cardíaca es muy útil y una buena manera de aprender hábitos saludables de ejercicio en un entorno supervisado.
Los fisioterapeutas a menudo pueden hacer visitas a domicilio y realizar fisioterapia en su hogar.
Evita caídas
Evitar las caídas es una prioridad para los adultos mayores. Una caída puede poner en marcha una serie de eventos que pueden conducir a una movilidad reducida y una pérdida de independencia funcional.
Factores de riesgo de caídas:
Hipoglucemia: un nivel bajo de azúcar en la sangre puede desencadenar una pérdida del equilibrio y provocar una caída, así que controle el nivel de glucosa en la sangre con regularidad. Si la glucosa en sangre cae por debajo de 70 mg/DL, consuma carbohidratos de acción rápida de inmediato.
Medicamentos: algunos medicamentos que se toman para la presión arterial alta pueden causar mareos al ponerse de pie (hipotensión postural). Una forma de evitar caídas por hipotensión postural es flexionar cada tobillo 10 veces antes de ponerse de pie.
La neuropatía periférica o la pérdida de sensibilidad en los pies y/o la pérdida del equilibrio pueden aumentar el riesgo de una caída.
La pérdida de la visión puede provocar inestabilidad y dificultad para ver los objetos que obstruyen.
Problemas en las articulaciones grandes: las personas con diabetes tipo 1 parecen desarrollar problemas en las articulaciones grandes y esto puede provocar dolor y discapacidad.
Una caída y una fractura por osteoporosis pueden llevar a un período de inmovilidad forzada y la recuperación puede ser difícil. Sus proveedores de atención médica deben evaluarlo para detectar estos problemas y su riesgo de caídas.
Los beneficios de la actividad física La actividad física no solo puede ayudarlo a mantener el equilibrio, sino que también puede ayudar a retrasar parte del deterioro cognitivo que se observa con el envejecimiento.
Caminar puede ser el mejor y más simple ejercicio para mantener la función, pero también es importante hacer ejercicios con pesas, como yoga o usar pesas libres o máquinas, para mantener la densidad ósea y el volumen muscular.
American Diabetes Association
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